En estas épocas muchas de las tensiones son creadas por distintas situaciones sociales o de la realidad que todos compartimos en mayor o menor medidad, como la pandemia, por ejemplo.
La emergencia de mayores incertidumbres respecto a la estabilidad laboral, económica y previsión de futuro, funcionan como detonantes de conflictivas familiares que anudan en si mísmas otras que se encontraban fuera de escena en el discurrir de la cotidianeidad.
Hay problemas que pueden surgir con los familiares próximos, en particular hijos, padres y hermanos, o también con las familias originarias, repercutiendo en peleas conyugales. A lo que pueden sumarse problemas de intimidad, de lugares, de autoridad y roles.
En estas épocas muchas de las tensiones son creadas por distintas situaciones sociales o de la realidad que todos compartimos en mayor o menor medidad, como la pandemia, por ejemplo.
La emergencia de mayores incertidumbres respecto a la estabilidad laboral, económica y previsión de futuro, funcionan como detonantes de conflictivas familiares que anudan en si mísmas otras que se encontraban fuera de escena en el discurrir de la cotidianeidad.
Hay problemas que pueden surgir con los familiares próximos, en particular hijos, padres y hermanos, o también con las familias originarias, repercutiendo en peleas conyugales. A lo que pueden sumarse problemas de intimidad, de lugares, de autoridad y roles.